ALKYONI BOUCHALAKI
Visión
Me costó media vida encontrar y ocupar mi lugar en el mundo.
Acaso, ¿se mide la vida?
En mi lugar, todavía estoy alisando el suelo, expulsando lo inútil. Dejando más espacio para que cimiente mi autenticidad y se edifique mi yo bajo mis condiciones.. Humildemente. En la medida de lo posible.
Hay un momento que, cuando algo de vida ha pasado, te sitúas frente a una encrucijada repentinamente para elegir la órbita de vivir.
Con palabras de la mente, mi encrucijada me decía:
o te sometes a la ilusión de que estás viva o vas a procurar vivir.
¿Vivir de modo ordinario o extraordinario?
El sistema me proponía, aparte de no escuchar mis necesidades reales, obtener una actitud de entrega con ritmos ajenos. Sin poder gestionar y aprovechar realmente mi tiempo de vida como yo considere “productivo” y fructífero, quise redefinir lo dado y ordinariamente establecido.
La vida es tiempo y
cómo habitas el tiempo,
habitas tu vida
¡Y sí! Se trata de habitar el tiempo en la medida que se pueda y no ser una mera transeúnte.
Alejándote de tu naturaleza, consecuentemente te alejas del ser humano y de ser humana.
Y esto para mí era innegociable. Elegí la órbita de la vía extraordinaria.
¿Cómo sirvo a los y las demás?
Y así, empieza mi camino...